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¿Qué hacer en caso de sobredosis de fentanilo? Guía de reacción inmediata

El fentanilo ilegal causa estragos en Estados Unidos, con más de 100 mil muertes anuales por sobredosis, mientras que en México la cifra de decesos por esta causa es considerablemente menor y se concentra principalmente en ciudades fronterizas con el vecino del norte.

En este contexto, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han difundido información crucial para que el público sepa cómo actuar en caso de presenciar una posible sobredosis y así evitar tragedias.

El fentanilo, una potente droga sintética derivada del opio, es utilizada en el ámbito médico para procedimientos quirúrgicos y para aliviar el dolor en enfermedades terminales como el cáncer de páncreas. Considerado el opioide más potente del mundo, su consumo ilegal suele ir acompañado de otras sustancias peligrosas, lo que puede resultar en sobredosis letales si no se actúa con rapidez.

La Administración de Control de Drogas (DEA) advierte que el fentanilo es aproximadamente 100 veces más potente que la morfina y 50 veces más potente que la heroína, por lo que insta a evitar su consumo a toda costa.

Para identificar una sobredosis por fentanilo, las autoridades estadounidenses señalan signos como pupilas contraídas, somnolencia extrema, dificultad para respirar y piel fría. En caso de presenciar estos síntomas, es crucial llamar de inmediato a los servicios de emergencia y seguir un protocolo de actuación que incluye la administración de naloxona, un fármaco que ha demostrado ser efectivo en revertir los efectos del fentanilo.

En Estados Unidos, la naloxona es de venta libre en farmacias, pero en México su venta está restringida y requiere receta médica. A pesar de esto, existe una iniciativa en el Congreso para desclasificarla como sustancia psicotrópica, lo que facilitaría su disponibilidad y potencialmente salvaría más vidas en el país.

La lucha contra el fentanilo ilegal es un desafío que requiere de la colaboración de autoridades, profesionales de la salud y la sociedad en su conjunto. Estar informados y preparados para actuar ante una sobredosis es fundamental para prevenir más tragedias relacionadas con esta peligrosa droga.

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