Señales de alerta: ¿Tu hijo(a) está siendo víctima de acoso escolar?
El bullying escolar, un problema que afecta a la mayoría de los niños en México
Al menos 7 de cada 10 niños en México han sido víctimas de bullying o acoso escolar, según información proporcionada por la Organización No Gubernamental Bullying Sin Fronteras, colocando al país en primer lugar en esta problemática. Lamentablemente, muchas de las víctimas enfrentan este proceso en silencio y no reciben el apoyo necesario por parte de los adultos que los rodean.
Maribel Ivon Tequianez Gutiérrez, psicoterapeuta en Desarrollo Infantil, destaca que muchos de los menores que sufren bullying no saben cómo defenderse o comunicar de manera efectiva a los adultos lo que les está sucediendo. Por lo tanto, es crucial que los tutores estén atentos a cualquier cambio en el comportamiento de sus hijos, ya que la violencia puede dejar marcas para toda la vida.
¿Qué señales podrían alertar que un menor está siendo víctima de violencia? Algunas de las señales incluyen cambios repentinos en su comportamiento, dificultad para hablar sobre lo que sucede en la escuela, aislamiento, irritabilidad, ansiedad, entre otros.
A largo plazo, el bullying puede provocar trastornos de alimentación, del sueño, autolesiones, depresión e incluso suicidio. Maribel Tequianez enfatiza que los casos de bullying pueden llegar a extremos como el suicidio si no se abordan adecuadamente, por lo que insta a los padres a prestar atención y apoyar a sus hijos en cualquier dificultad que enfrenten.
La importancia de recibir terapia desde la primera infancia es fundamental, ya que en esta etapa se establecen los cimientos para que los niños sean seguros y resilientes ante situaciones adversas. Los padres deben estar conscientes de que la adolescencia es una etapa crítica donde surgen cuestionamientos y situaciones de riesgo, por lo que la terapia puede proporcionar herramientas que serán útiles a lo largo de la vida.
En resumen, la salud mental de los niños es de suma importancia para prevenir que estas problemáticas se conviertan en una bomba de tiempo. Es fundamental que los padres estén atentos, brinden apoyo emocional y busquen ayuda profesional si es necesario para garantizar el bienestar de sus hijos en un entorno escolar seguro y saludable.
