PRI se queda con solo un diputado en Puebla: renuncian cinco inconformes por alianza con el PAN
Renuncia de diputados del PRI en Puebla genera crisis en la bancada tricolor
En una sorprendente decisión, cinco de los seis diputados que conformaban la bancada del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Puebla han renunciado a su afiliación tricolor, dejando al partido con un único integrante, el diputado Néstor Camarillo.
Esta inesperada renuncia fue anunciada durante una conferencia de prensa por los cinco diputados anteriormente pertenecientes al PRI, quienes expresaron su descontento con las alianzas que su partido ha establecido con el Partido Acción Nacional (PAN), alegando que estas alianzas perjudican a su militancia.
“Anunciamos que los cinco integrantes del grupo legislativo del PRI hemos tomado la decisión de convertirnos en un grupo sin partido dentro del Congreso. Con esto, enviamos un mensaje a todos aquellos que no se sientan identificados con la dirección que ha tomado el PRI para que se unan a este importante esfuerzo”, declaró el legislador Jorge Estefan Chidiac.
Además de Chidiac, también presentaron su renuncia Laura Zapata Martínez, Juan Enrique Rivera Reyes, Norma Sirley Reyes y Adolfo Alatriste Cantú. Estos legisladores descartaron unirse a otra bancada y en su lugar han decidido formar una fracción independiente dentro del órgano legislativo poblano.
La reacción de la dirigencia nacional del PRI no se hizo esperar. Alejandro Moreno, el líder del partido, quien se encontraba en la entidad para ratificar la candidatura de Eduardo Rivera a la gubernatura, criticó a estos diputados, señalando que querían ser candidatos por el PRI pero al mismo tiempo trabajar “para el gobernador y para Morena”.
“Cuando están en las listas plurinominales, todo está bien, pero cuando no están, no está bien. Aquí no hay chantajes ni presiones, me alegra mucho que ya no estén en el partido”, expresó Moreno.
Por su parte, Néstor Camarillo, el único representante priista que permanece en la fracción priista, manifestó a través de sus redes sociales: “Aquellos que se han ido ya no estaban con nosotros. Aquí tenemos a mujeres y hombres comprometidos con Puebla y con México”.
Esta renuncia masiva representa un duro golpe para el PRI en Puebla, ya que pierde la mayor parte de su representación en el Congreso local. Además, pone de manifiesto las divisiones internas dentro del partido y la insatisfacción de algunos militantes con las alianzas establecidas.
La incógnita ahora radica en cómo afectará esta situación al PRI en Puebla de cara a las próximas elecciones. Sin duda, esta crisis interna representa un desafío para el partido, que deberá encontrar la manera de recuperar la confianza de sus militantes y adaptarse a esta nueva realidad política.