Los 7 políticos y candidatos asesinados: Una mirada al proceso electoral en México
El próximo domingo 2 de junio de 2024, las y los mexicanos saldrán a votar para participar en las que se consideren las elecciones más grandes de la historia del país. Sin embargo, desde meses antes, este proceso electoral ha estado protagonizado por una ola de violencia, en el que se ha registrado el asesinato de al menos siete políticos.
Recordemos que este año en México se están orquestando votaciones federales y locales. Es decir, por un lado se elegirá a quien ocupe la silla presidencial y los lugares en el Congreso —Cámara de Diputados y de Senadores—. Pero por otro, se renovará la gubernatura de nueve estados —incluida la Ciudad de México (CDMX)—, Congresos locales, ayuntamientos y alcaldías. No obstante, en el proceso se han presentado varios crímenes.
En diciembre del año pasado, Ricardo Taja Ramírez, aspirante por Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), fue asesinado a balazos mientras se encontraba en un establecimiento de comida en Acapulco, Guerrero. Hasta el momento, la Fiscalía General de Justicia del Estado inició una carpeta de investigación por el delito de homicidio calificado.
El 4 de enero de 2024, el regidor del Partido Acción Nacional (PAN) en Cuautla, Morelos, Giovanni Lezama, fue víctima de un ataque armado mientras se encontraba en un gimnasio. Cabe mencionar que el político aspiraba a ocupar una diputación local en las elecciones de este año.
En el marco del homicidio de Giovanni Lezama, David Rey González, aspirante a la presidencia municipal de Suchiate, Chiapas, fue asesinado también. El precandidato de la coalición de los Partidos Revolucionario Institucional (PRI), de la Revolución Democrática (PRD) y PAN fue víctima de una agresión que le quitó la vida mientras conducía en su motocicleta con dirección al ejido La Pita.
Casi a la par que el suceso ocurrido en Chiapas, Sergio Hueso, quien era precandidato a la alcaldía de Armería, Colima, por Movimiento Ciudadano (MC), fue interceptado cuando iba en su automóvil en la Avenida Oaxaca perteneciente a la colonia El Pelillo.
Uno de los casos que causó mayor indignación a nivel nacional fue el transfeminicidio de Miriam Ríos Ríos, activista trans y comisionada municipal de MC en Jacona, Michoacán. La política que fue asesinada en la colonia Libertad había anunciado sus intenciones de estar en la planilla para regidora en su Ayuntamiento.
El último crimen ocurrido en la política mexicana rumbo a las elecciones de este 2024 fue el de Marcelino Ruíz Esteban, exalcalde de Atlixtac, Guerrero, y su esposa Guadalupe Guzmán Cano, consejera estatal del PRD. Ambos fueron víctimas de un ataque a balazos en la carretera Tlapa-Chilpancingo.
Estos lamentables asesinatos han generado preocupación en la sociedad mexicana y han puesto en evidencia el clima de violencia que se vive en el país. Es fundamental que las autoridades tomen medidas para garantizar la seguridad durante el proceso electoral y para investigar y castigar a los responsables de estos crímenes.
La violencia política no debe tener cabida en una democracia. Es importante que los mexicanos puedan ejercer su derecho al voto de manera libre y segura, sin temor a represalias o intimidaciones. Solo así se podrá construir un país más justo y equitativo.
Esperemos que las autoridades competentes tomen cartas en el asunto y brinden las garantías necesarias para que las elecciones del próximo 2 de junio se desarrollen en un ambiente de paz y respeto. La violencia no puede ser un obstáculo para la participación ciudadana y la construcción de un mejor México.