Los 26 países más pobres enfrentan una crisis financiera sin precedentes desde 2006: Informe del Banco Mundial
El Banco Mundial alerta sobre el peor momento financiero de los 26 países más pobres
A una semana del inicio de las reuniones anuales del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional en Washington, se ha publicado un informe preocupante que confirma un retroceso significativo en los esfuerzos por erradicar la pobreza extrema en el mundo. Según el informe, las 26 economías más pobres, cuya renta per cápita anual es inferior a 1,145 dólares, están enfrentando su peor momento financiero desde 2006.
Estas economías dependen cada vez más de las donaciones de la Asociación Internacional de Fomento (AIF) y de préstamos a tasas de interés casi nulas, ya que la financiación del mercado se ha agotado en gran medida. El informe destaca que el ratio deuda/PIB promedio de estos países ha alcanzado su nivel más alto en los últimos 18 años, con la mitad del grupo enfrentando dificultades de endeudamiento o alto riesgo de padecerlas.
Además, dos tercios de los 26 países más pobres se encuentran inmersos en conflictos armados o tienen dificultades para mantener el orden debido a la fragilidad institucional y social, lo que inhibe la inversión extranjera. Casi todos estos países dependen de la exportación de materias primas, lo que los expone a frecuentes ciclos de auge y caída.
El economista jefe del Banco Mundial, Indermit Gill, ha destacado el papel crucial de la AIF como “salvavidas” para estos países durante los últimos años. En 2021, la AIF logró recaudar la cifra récord de 93,000 millones de dólares, y se espera superar esta cantidad con más de 100,000 millones de dólares en compromisos antes del 6 de diciembre.
El informe también resalta el impacto devastador de las catástrofes naturales en estos países, con pérdidas anuales promedio del 2% del PIB entre 2011 y 2023. Ante esta situación, el Banco Mundial recomienda que estas economías mejoren la recaudación de impuestos, simplifiquen el registro de contribuyentes y la administración tributaria, y aumenten la eficiencia del gasto público.
En un momento en el que el mundo enfrenta desafíos sin precedentes, es fundamental que se redoblen los esfuerzos para apoyar a los países más pobres y vulnerables. La comunidad internacional debe unirse en solidaridad y comprometerse a proporcionar la ayuda necesaria para garantizar un futuro más próspero y sostenible para todos.
