La SAT tiene a la gallina de los huevos de oro asegurada por mucho tiempo
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) continúa fortaleciendo su labor de fiscalización a grandes contribuyentes en México, con el objetivo de garantizar que las empresas cumplan con sus obligaciones fiscales y contribuyan de manera justa al sistema tributario del país.
Según el administrador general de Recaudación del SAT, Gari Flores Hernández González, la recaudación sigue creciendo gracias a la fiscalización de grandes contribuyentes, lo que ha demostrado ser una estrategia rentable para el fisco mexicano. La institución tiene la facultad de revisar los últimos cinco años de las grandes empresas, lo que impide que puedan evadir impuestos mediante planeaciones fiscales agresivas.
Además, se ha eliminado la intermediación de despachos contables en las negociaciones entre el SAT y los contribuyentes, lo que ha facilitado un acercamiento directo y transparente en la resolución de adeudos fiscales. Esta política ha demostrado ser efectiva, ya que muchas empresas han corregido sus errores y regularizado su situación con el fisco.
La meta de recaudación total de impuestos para el cierre de 2024 es de 5 billones de pesos, y se espera superarla en 4,000 millones según las proyecciones del SAT. La fiscalización a grandes contribuyentes ha sido clave en este aumento de recaudación, ya que en los primeros cinco meses del año se recaudaron 395,025 millones de pesos, cifra superior en 261,563 millones respecto al año anterior.
Entre los sectores económicos más fiscalizados se encuentran el acerero, automotriz, construcción, electrónicos y del sistema financiero, donde se concentra la mayoría de las grandes empresas que facturan más de 1,800 millones de pesos al año. Algunas de las compañías que han regularizado sus adeudos fiscales en este periodo son Walmart, América Móvil, BBVA México, Grupo Modelo, IBM, FEMSA, Grupo BAL y Grupo Salinas.
La estrategia de fiscalización se ha extendido también a las medianas y pequeñas empresas, con el objetivo de mejorar los procesos de cumplimiento tributario y garantizar que todos los contribuyentes cumplan con sus obligaciones fiscales. Esta ampliación ha permitido un aumento considerable en la recaudación por auditorías a estos sectores, contribuyendo al fortalecimiento del sistema tributario mexicano.
En resumen, la fiscalización a grandes contribuyentes ha demostrado ser una herramienta eficaz para incrementar la recaudación de impuestos en México y garantizar la equidad en el sistema tributario. La transparencia y el acercamiento directo entre el SAT y las empresas han sido clave en el éxito de esta estrategia, que se espera siga dando resultados positivos en los próximos años.