El Presidente de China insta a una política económica más proactiva en 2025
La economía china enfrenta una deflación debido a una grave crisis inmobiliaria y niveles de consumo por debajo de los preexistentes a la pandemia.
En respuesta, Beijing ha implementado varias medidas de estímulo fiscal, como la reducción de tasas de interés y el aumento del límite de deuda de los gobiernos locales. A pesar de esto, expertos señalan que se requieren medidas más directas para mantener el crecimiento económico.
En su discurso de Año Nuevo, Xi Jinping afirmó que la economía china está bajo “presión” para “transformarse” y migrar hacia nuevas fuentes de crecimiento, afrontando un “entorno externo incierto”.
El líder chino expresó su confianza en alcanzar el objetivo oficial de crecimiento del PIB del 5% en 2024, una meta cuestionada por algunos expertos. Las cifras oficiales de crecimiento económico se darán a conocer en enero.
Estas declaraciones llegaron después de que se publicara un índice mensual de la actividad manufacturera en China, en alza por tercer mes consecutivo. Los pedidos de exportación alcanzaron su nivel más alto en cuatro meses, posiblemente debido a un aumento en los pedidos de importadores estadounidenses anticipando posibles aranceles de Donald Trump.
El presidente electo de Estados Unidos, quien asumirá el cargo el 20 de enero de 2025, prometió aumentar los aranceles a las importaciones chinas, lo que podría impactar significativamente en la economía del gigante asiático.