El impacto del gasto en pensiones y deuda: un análisis del 38% del presupuesto en 2025
El impacto de las pensiones en el presupuesto mexicano para el año 2025 es un tema que ha generado preocupación entre los especialistas y analistas financieros. Según las proyecciones, el pago de pensiones representará el 23% de todo el presupuesto previsto, que asciende a 9.22 billones de pesos.
Este incremento en el costo de las pensiones se debe en gran medida al envejecimiento de la población, lo que ha sido señalado como una bomba de tiempo que seguirá consumiendo recursos a largo plazo. Ante esta situación, se ha vuelto urgente la necesidad de hacer más eficiente la recaudación y mejorar los esquemas de pensiones para garantizar la sostenibilidad del sistema.
Por otro lado, el gobierno estima un gasto de 1.39 billones de pesos en el pago de la deuda, lo que representa un 15% del total del presupuesto. Sin embargo, esta cifra ha generado preocupación entre los analistas, ya que se proyecta que la deuda pública alcanzará el 51.4% del PIB, una cifra que no es bien vista por el sector financiero.
En este contexto, el gobierno de Claudia Sheinbaum ha solicitado un aumento del techo de la deuda de 1.5 billones de pesos para poder cumplir con sus obligaciones financieras. Además, en cuanto a las participaciones federales, se prevé un gasto de 1.3 billones de pesos, un 3.7% más de lo aprobado en el año anterior.
Ante esta situación, BBVA Research ha destacado la necesidad de una reforma fiscal que aumente los ingresos tributarios para hacer frente a la fragilidad en las finanzas públicas. El secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, ha señalado que el gobierno es consciente de la realidad de los recursos y ha dado señales de que una reforma fiscal podría estar cerca.
Tanto BBVA como Citibanamex han resaltado la importancia de una reforma fiscal profunda que reduzca la informalidad y mejore la eficiencia en el gasto público. Sin embargo, la decisión de posponer esta reforma ha generado incertidumbre en el mercado financiero, con Moody’s bajando la perspectiva de México a “negativa” desde estable.
En resumen, el panorama económico de México para el año 2025 presenta desafíos importantes en términos de pensiones, deuda y participaciones federales. La necesidad de una reforma fiscal se vuelve imperativa para garantizar la estabilidad financiera y el crecimiento sostenible del país en los próximos años.