Diabetes y salud bucal: riesgos desde malformaciones hasta pérdida de dientes
Los problemas de salud bucal derivados de la diabetes pueden tardar en detectarse entre 8 y 10 años previos, cuando se identifican alteraciones en la glucosa, lo cual puede generar cambios a nivel cardiovascular que desencadenan en males bucales como gingivitis, boca seca, e incluso malformaciones y dificultades para masticar y la pérdida de dientes, según la nutrióloga y especialista en diabetes de la UAM, Jaqueline Alcántara.
La alteración de la glucosa está relacionada con la falta de insulina, y la diabetes tipo 2 puede manifestarse de manera tardía debido a que en la primera etapa el paciente aún produce insulina. En casos de infecciones generales o cuando los tratamientos orales no son efectivos durante procedimientos dentales, el médico puede ajustar el tratamiento adecuado.
En México, se estima que un 12.6% de la población sufre de diabetes diagnosticada y un 5.8% tiene diabetes no diagnosticada, lo que representa una prevalencia total del 18.5%. De acuerdo con el Instituto Nacional de Salud Pública, aproximadamente 14.6 millones de personas padecen esta enfermedad, lo que las hace vulnerables a complicaciones en la cavidad bucal.
Aunque no se cuenta con cifras específicas sobre el número de personas que presentan problemas bucales debido a la diabetes, la mayoría de los pacientes que acuden a consulta son mujeres. Del total del 90% de la población mexicana que sufre de caries, el 70% también padece alguna enfermedad periodontal, según la educadora en diabetes de Ultra-Fine.
El gobierno federal ha señalado que México ocupa el séptimo lugar a nivel mundial en adultos con problemas de diabetes, y se estima que para 2045 baje un puesto en la lista, siendo China el país con la mayor incidencia. Jaqueline Alcántara mencionó que las personas que presentan complicaciones bucales por diabetes suelen ser mayores de 30 años.
La diabetes puede debilitar los glóbulos blancos, lo que provoca un aumento de infecciones bacterianas en la boca. La presencia de altos niveles de glucosa en la sangre también se refleja en la saliva, lo que facilita el desarrollo de caries y enfermedades en las encías.
Para prevenir y tratar problemas bucales relacionados con la diabetes, es fundamental mantener un adecuado control de los niveles de glucosa a través de una alimentación balanceada que reduzca el consumo de azúcares, así como seguir un tratamiento de insulina en casos más graves. Es importante que los odontólogos conozcan el historial médico de los pacientes para diagnosticar y tratar de manera integral cualquier complicación.
Además, se recomienda a los pacientes diabéticos seguir medidas preventivas como cepillarse los dientes adecuadamente, usar hilo dental regularmente, informar al dentista sobre su condición de diabetes, evitar el tabaquismo y acudir a revisiones periódicas. Solo el 31% de las personas acude de manera regular al dentista, por lo que es fundamental priorizar la salud bucal en pacientes con diabetes.