Descubre cómo identificar botellas falsificadas con la ayuda del SAT
El consumo de bebidas alcohólicas adulteradas representa un grave problema de salud pública en México, con altos niveles de toxicidad y mortalidad asociados. Según la Secretaría de Salud, la tasa de mortalidad puede llegar hasta el 50% en casos de consumo de estas bebidas falsificadas. Por esta razón, es crucial verificar la autenticidad de las botellas mediante el marbete de Hacienda.
El marbete es una etiqueta de control fiscal y sanitario que se encuentra adherida o impresa en los envases de bebidas alcohólicas de hasta cinco litros. Esta etiqueta es obligatoria para fabricantes, productores, comercializadores e importadores, y garantiza que las botellas cumplen con las normativas fiscales y sanitarias establecidas.
Existen dos tipos de marbetes: físicos y electrónicos. Los marbetes físicos están impresos en papel con medidas de seguridad similares a las de un billete, incluyendo impresión sensible al tacto, tintas especiales, cambio de color en el logotipo y un código QR. Por otro lado, los marbetes electrónicos forman parte de la etiqueta o contraetiqueta de las botellas, con un código QR y un número de folio autorizado.
Para verificar la autenticidad de una botella, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) explica que cualquier consumidor puede escanear el código QR del marbete con un dispositivo móvil con acceso a internet. Al hacerlo, la información obtenida debe coincidir con los datos de la botella, incluyendo marca, tipo de bebida, graduación alcohólica, capacidad, origen, fecha de envasado y lote de producción.
Además, los marbetes tienen colores diferenciados según el tipo de producto: verde para bebidas nacionales y color vino para bebidas importadas. El uso del marbete no solo protege a los consumidores de adquirir productos ilegales o adulterados, sino que también garantiza el pago correcto de impuestos, demostrando que las empresas productoras y distribuidoras de las bebidas alcohólicas están registradas formalmente ante el SAT y la Secretaría de Hacienda.