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AMLO heredará sexta parte de fondos FEIP y FEIEF de Peña Nieto al próximo presidente

La falta de recursos en los fondos de emergencia pone en una posición vulnerable al nuevo gobierno en México, sin importar quién resulte ganador en las próximas elecciones. Expertos señalan que la ausencia de ahorros o un “guardadito” implica que ante cualquier contingencia, el país se verá obligado a recurrir a préstamos, lo que aumenta el riesgo financiero a mediano plazo.

Estos fondos de emergencia se nutren principalmente de ingresos públicos adicionales a los esperados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), provenientes de la recaudación de impuestos y la venta de petróleo mexicano. Sin embargo, en los últimos años, estos ingresos han sido menores de lo estimado, lo que ha llevado a utilizar los recursos de los fondos de emergencia.

En el año 2019, se registró una caída en la economía mexicana, lo que impactó negativamente en los ingresos por impuestos y obligó a recurrir a los fondos de emergencia. La situación se repitió en 2020 debido a la pandemia de COVID-19. A pesar de que en 2022 se ha observado una ligera recuperación en los fondos, esta no ha sido suficiente para alcanzar los niveles previos a las crisis económicas anteriores.

Recientemente, el Congreso aprobó nuevas fuentes de ingresos para los fondos de emergencia, como los ahorros del costo financiero de la deuda pública y aportaciones del gobierno federal. Sin embargo, los recursos disponibles en estos fondos siguen siendo limitados, lo que representa un desafío en un contexto de menores ingresos por renta petrolera y gastos obligatorios que presionan el presupuesto público año tras año.

Los expertos advierten que el gasto público en México no es adaptable, lo que implica que no se ajusta de manera dinámica a las condiciones económicas del país. Ante una disminución en los ingresos públicos, el gobierno se ve obligado a recurrir al endeudamiento, lo que incrementa el riesgo financiero a mediano plazo. En este sentido, el crecimiento de la deuda como porcentaje del PIB se convierte en un factor de riesgo para la estabilidad económica del país.

En resumen, la falta de recursos en los fondos de emergencia y la dependencia del endeudamiento para cubrir gastos representan un desafío para el nuevo gobierno mexicano, independientemente del resultado de las elecciones. Es fundamental implementar medidas que fortalezcan la capacidad de respuesta ante contingencias y garanticen la sostenibilidad financiera a largo plazo.

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