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Explorando las Estaciones de Aeropuertos en la Ruta México-Querétaro-Guadalajara

El proyecto del Tren México-Querétaro-Guadalajara, impulsado por la administración de Claudia Sheinbaum, está cada vez más cerca de convertirse en una realidad que transformará el sistema de transporte en el país.

Con una extensión de 581 kilómetros y un presupuesto de 55 mil millones de pesos, la construcción de esta obra de infraestructura ferroviaria está programada para comenzar el 1 de octubre de 2024 y concluir el 17 de mayo de 2029. Durante este periodo, se estima que se crearán 37 mil empleos directos y 18 mil 500 indirectos, lo que representará un impulso significativo para la economía y el empleo en la región.

Una de las principales ventajas que ofrecerá este tren de pasajeros es la reducción considerable del tiempo de viaje en comparación con otras opciones de transporte. Mientras que en automóvil el trayecto puede llevar hasta cinco horas, con el Tren México-Querétaro-Guadalajara se estima un tiempo de viaje de aproximadamente tres horas con 34 minutos, gracias a una velocidad máxima de 160 kilómetros por hora.

Además, este proyecto conectará importantes aeropuertos en la región, como el Aeropuerto Internacional de Guadalajara, el Aeropuerto Internacional del Bajío, el Aeropuerto Internacional de Querétaro, el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles y el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México. Esta interconexión con los aeropuertos facilitará la movilidad de pasajeros y potenciará el turismo en las diferentes ciudades que atraviese el tren.

La ruta del Tren México-Querétaro-Guadalajara abarcará importantes destinos como Cuautitlán, Tula de Allende, San Juan del Río, Santiago de Querétaro, Celaya, Salamanca, Irapuato, La Piedad de Cabadas, La Ribera, Ocotlán, Poncitlán y Guadalajara. Con este recorrido, se espera mejorar la conectividad entre estas ciudades y fomentar el desarrollo económico en la región.

En resumen, el Tren México-Querétaro-Guadalajara se posiciona como un proyecto clave para modernizar la infraestructura de transporte en México, generar empleo y promover la movilidad sostenible en la región. Con su puesta en marcha, se espera mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y potenciar el crecimiento económico en las zonas que atraviese esta importante obra de ingeniería.

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