Ministros de Economía del G20 buscan consenso previo a elecciones en EU
La reciente reunión de ministros y banqueros centrales en Sao Paulo en febrero no logró llegar a un acuerdo sobre la situación en Ucrania y Gaza, lo que ha llevado a un nuevo enfoque en el G20. Se busca desplazar la atención hacia la cooperación económica en temas como el cambio climático y la pobreza, con Brasil liderando la propuesta de un impuesto mundial a los superricos.
La presión por lograr avances antes de la próxima reunión del grupo de trabajo en octubre es alta, ya que la cumbre del G20 en noviembre coincidirá con las elecciones en Estados Unidos. La posible reelección de Donald Trump, que aboga por recortes de impuestos, podría afectar la propuesta brasileña de impuesto global a los multimillonarios.
Sin embargo, Brasil ha logrado el apoyo de varios países y organismos internacionales, presentando la propuesta como una forma de hacer más justo el sistema fiscal mundial y reducir la desigualdad global. La iniciativa, elaborada por el economista Gabriel Zucman, prevé un gravamen anual del 2% sobre las fortunas que superen los 1,000 millones de dólares, con la posibilidad de recaudar hasta 250,000 millones anuales de unos 3,000 particulares.
Con Sudáfrica asumiendo la presidencia del G20 el próximo año, Brasil busca consolidar su propuesta y avanzar en la cooperación fiscal internacional. A pesar de las elecciones en Estados Unidos, la fiscalidad sigue siendo un tema central en el ámbito financiero, con la esperanza de lograr acuerdos significativos en las próximas reuniones del G20.
