Misteriosa desaparición de la Policía de Guerrero en ruta de Chilpancingo a Acapulco
René Ángel López Oliva, agente de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Guerrero, ha desaparecido en circunstancias misteriosas mientras viajaba hacia el puerto de Acapulco. El joven de 30 años de edad fue visto por última vez a las 23:30 horas del martes 19 de marzo, cuando salió de Chilpancingo en compañía de su primo Luis Alejandro Paulin Medina, de 18 años.
Según la denuncia presentada por sus familiares, ambos jóvenes viajaban en un vehículo gris de la marca Volkswagen, tipo Golf, pero hasta el momento no se tiene información sobre su paradero ni el automóvil en el que se desplazaban.
La esposa de René Ángel, María Fernanda Chávez Cervantes, expresó su preocupación en una entrevista con El Heraldo de México, mencionando que su esposo dejó su equipo de trabajo en Acapulco antes de desaparecer, ya que tenía que presentarse a laborar al día siguiente. La incertidumbre y la angustia se han apoderado de la familia y amigos del joven agente de la SSP Guerrero.
La denuncia por desaparición fue formalizada ante la Fiscalía General de Guerrero por parte de los familiares de René y Alejandro, quienes han exigido a las autoridades una pronta y efectiva búsqueda de los desaparecidos. Leticia Oliva Trinidad, madre de René, clamó por ayuda durante una manifestación realizada en el bulevar de Las Naciones, donde se bloquearon los carriles para llamar la atención sobre el caso.
Las autoridades de la Fiscalía Regional de Acapulco han iniciado operativos de rastreo y búsqueda de René Ángel López Oliva y su primo, con el objetivo de dar con su paradero lo antes posible. La SSP Guerrero ha comunicado que se encuentra colaborando estrechamente con la familia del agente desaparecido, brindando apoyo y seguimiento integral al caso.
La incertidumbre y la preocupación continúan en Guerrero ante la desaparición de René Ángel López Oliva, un valioso miembro de la fuerza policial estatal. Se espera que las autoridades logren esclarecer este caso y que René y su primo regresen sanos y salvos a sus hogares.