La Última Batalla de Fuerza Guerrera en la Arena CDMX
Fuerza Guerrera se despide de los cuadriláteros en la Arena CDMX
La lucha libre mexicana ha perdido a una de sus grandes leyendas. Fuerza Guerrera vivió su última lucha como profesional en la emblemática Arena CDMX, cerrando así un capítulo de más de 52 años en el emocionante mundo del pancracio. En un enfrentamiento lleno de acción y sangre, El Mosco de la Merced, junto a Hijo del Solitario y DMT Azul, logró derrotar a una terna conformada por Hijo de Silver King, Blue Demon Jr y Tinieblas Jr.
Tras concluir el combate, tanto los gladiadores como la afición se unieron para rendir homenaje a la trayectoria de Fuerza Guerrera, quien decidió retirarse a los 72 años de edad, dejando una huella imborrable en el corazón de los aficionados y en la historia de la lucha libre mexicana.
Lucha Semifinal y el Poder de la Dinastía Real
En la lucha semifinal, la dinastía real integrada por Rush, Dralistico y Bestia del Ring se llevó la victoria ante el equipo de L.A. Park, Hijo de LA Park y LA Park Jr. Este enfrentamiento estuvo marcado por la intervención de negocio traumado y Fuerza Guerrera, quienes apoyaron al Toro Blanco y su familia, añadiendo un toque dramático a la contienda.
Copa Dinastía y el Auge de Nuevas Estrellas
En otro emocionante momento de la velada, Hija de Fuerza Guerrera y Fotneo se coronaron campeones de la Copa Dinastía tras vencer en la final a Brazo Cibernético y Ayako Hamada. Además, Fresero Jr y Demonio Infernal mostraron su destreza al imponerse sobre Puerkisa Extrema, Sicario del norte y Sicario del sur.
En el segundo combate triangular, Oni el Bendito se llevó la victoria con una espectacular plancha 450°, derrotando a Toxin y Látigo en un duelo que dejó a todos los presentes boquiabiertos. La primera lucha de la noche, denominada lucha aérea, fue ganada por Torito y Sol, quienes sorprendieron a Drago Kid y Extasis, y fueron recompensados con dinero por la afición por su destacada actuación.
Reflexiones Finales
La despedida de Fuerza Guerrera no solo marca el fin de una era, sino que también resalta la importancia de la lucha libre en la cultura mexicana. Este deporte, que combina el arte, el espectáculo y el sacrificio, continúa siendo un pilar en la identidad nacional, donde cada combate es un homenaje a las leyendas que han forjado su historia. La Arena CDMX se convierte así en un testigo del legado de Fuerza Guerrera y de nuevas generaciones que buscan seguir sus pasos en el cuadrilátero.



