El FMI alerta sobre el creciente endeudamiento global
La deuda pública a nivel mundial sigue siendo motivo de preocupación, especialmente en lo que respecta a la deuda privada de hogares y empresas no financieras. Según datos del Fondo Monetario Internacional, esta deuda representaba el 146% del PIB global a finales de 2023, una cifra alarmante que podría empeorar en el futuro.
La subdirectora del Departamento de Finanzas Públicas del FMI, Era Dabla-Norris, advirtió que la situación podría ser aún peor de lo esperado, ya que las proyecciones de deuda tienden a ser demasiado optimistas. Los ajustes presupuestarios anunciados por algunos Estados no serían suficientes para estabilizar o reducir la deuda pública, especialmente en economías clave como Estados Unidos y China, donde la deuda sigue aumentando.
Para lograr una reducción real de la deuda pública, sería necesario un ajuste del 3.8% del PIB cada año hasta el final de la década, una meta mucho más ambiciosa que el 1% actualmente previsto. Sin embargo, cualquier reducción significativa del gasto público podría tener graves repercusiones en el crecimiento económico y aumentar las desigualdades sociales.
El FMI ha insistido en la necesidad de que los Estados restauren sus márgenes presupuestarios, afectados por las crisis sucesivas desde la pandemia de Covid-19, para estar preparados ante futuras crisis. Además, se reconoce la importancia de invertir en la lucha contra el cambio climático y la adaptación de las sociedades para mitigar sus efectos.
El aumento de las tasas de interés en los últimos años ha complicado aún más la situación financiera de muchos países, incrementando el costo de los créditos y llevando a unos 40 países a enfrentar una crisis de deuda o estar cerca de ella debido al aumento del servicio de su deuda. Es crucial que se tomen medidas urgentes y efectivas para abordar este problema y evitar que la deuda pública siga creciendo descontroladamente.
