La reforma al salario mínimo: ¿Será suficiente para mejorar el ingreso de los trabajadores?
El Senado aprueba reforma al salario mínimo: ¿será suficiente para mejorar la economía?
El pasado 9 de octubre, el Senado de la República aprobó en lo general y particular la reforma al artículo 123 de la Constitución, la cual establece que los salarios mínimos generales y profesionales no podrán aumentar por debajo de la inflación. Esta reforma es una de las 20 propuestas presentadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Tras esta aprobación, la reforma pasará a los congresos locales para su discusión y eventual aprobación. Se requiere el aval de al menos 17 estados para que el Poder Ejecutivo la publique en el Diario Oficial de la Federación.
Según Iván Franco, fundador de la consultora Triplethree International, el artículo 123 es obsoleto y no refleja las condiciones laborales actuales en el país. Con la disminución del número de asalariados formales y el aumento del empleo informal, es necesario una reforma laboral integral que beneficie a todos los trabajadores.
Durante el sexenio pasado, el salario mínimo experimentó un incremento del 110% en términos nominales. Sin embargo, este aumento no fue suficiente para frenar la pérdida del poder adquisitivo, como señaló la especialista en economía Eréndira Yaretni Mendoza Meza.
Para que los aumentos salariales tengan un impacto positivo en la economía y en la calidad de vida de los trabajadores, es fundamental mejorar la productividad. En un país como México, con un crecimiento económico medio, la eficiencia en el uso de los recursos es clave para impulsar el desarrollo.
En el segundo trimestre del año, la productividad en México fue de apenas 0.2%, muy por debajo de la meta anual del 4.8%. Según Salvador Rotter Aubanel, de la Comisión de desarrollo de investigación fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, es necesario incentivar la productividad de los trabajadores para generar un crecimiento económico sostenible.
Una forma de lograrlo es a través de la inversión extranjera directa (IED). Para atraer esta inversión, Mendoza Meza sugiere aumentar la inflación de forma moderada, elevar la tasa de interés de referencia y permitir una devaluación controlada de la moneda.
La depreciación del peso mexicano puede compensar el riesgo de la inversión al ofrecer atractivas tasas de rendimiento. En este sentido, México se convierte en un destino atractivo para inversionistas y empresas que buscan expandir sus operaciones.
En resumen, la aprobación de la reforma al salario mínimo es un primer paso hacia la mejora de las condiciones laborales en México. Sin embargo, será necesario implementar medidas adicionales para incrementar la productividad y atraer inversiones que impulsen un crecimiento económico sostenible y beneficie a todos los trabajadores del país.